jueves, 17 de abril de 2014

Descubren nuevos beneficios para la mente por consumir café

Las propiedades del café permiten mejorar la concentración y permanecer despierto por más tiempo. Sin embargo, un estudio realizado recientemente en Europa demuestra que los beneficios de esta bebida no terminan allí, ya que su consumo es saludable para el cerebro.

Un estudio publicado esta semana por las universidades de Lille, Francia, y de Bonn, Alemania, concluyó que el consumo de café genera beneficios a largo plazo para la salud mental. De este modo, los responsables de la investigación ratificaron análisis previos y afirmaron que la cafeína ayudaría a prevenir el desarrollo del Alzheimer, entre otros beneficios para el cerebro. Por ello, además de permitir una mejor concentración, los ingredientes del café generan más ventajas en el organismo.

Para llegar a esta conclusión, el equipo de investigación de las dos universidades descubrió en sus experimentos con ratones de laboratorio cómo una sustancia similar a la cafeína impide que la proteína Tau se almacene en el cerebro. Este compuesto es uno de los indicadores principales del Alzheimer, por lo que prevenir su almacenamiento es fundamental para evitar el desarrollo de la enfermedad en el largo plazo.

De acuerdo con un cable de la agencia alemana de noticias DPA, los responsables del estudio franco-alemán constataron por primera vez el efecto de la cafeína en la proteína Tau. Además, la comunidad científica destacó el resultado de la investigación como un paso hacia adelante en la prevención del Alzheimer ya que se analizó un modelo animal donde la enfermedad se desarrolla de una forma similar a lo humanos.

Por su parte, desde la Sociedad Alemana de Geriatría enfatizaron que el estudio representa un comienzo prometedor de un camino “demasiado largo” contra el Alzheimer. Asimismo, hicieron hincapié en la falta de recursos para desarrollar aun más las investigaciones de este tipo, cuyos avances podrían ser cada vez más útiles contra una de las enfermedades más temidas durante la vejez.

En Estudios anteriores , también se comprobó que la cafeína reduce considerablemente los niveles anormales de otra proteína: la beta-amiloide. De hecho, un estudio realizado en Estados Unidos concluyó que tomar varias tazas de café al día podría revertir los problemas de memoria asociados con el Alzheimer. En esa ocasión, también se trabajó con ratones de laboratorio.

"Un equipo de la Universidad del Sur de Florida (EE.UU.)ha visto un elemento aún no identificado presente en el café y que interactúa con la cafeína pudiendo convertirse en un buen protector frente a la enfermedad de Alzheimer e intentan demostrar que el consumo diario de café podría ser una buena forma de prevenir el desarrollo de esta enfermedad. Aunque es en un modelo animal de Alzheimer, ratones,  dicha interacción aumenta los niveles en sangre de un factor de crecimiento fundamental que parece proteger contra el proceso de la enfermedad de Alzheimer.
Los hallazgos se publicaron en Journal of Alzheimer's Disease y muestran, en modelos de ratones modificados para desarrollar los síntomas que imitan la enfermedad de Alzheimer, la primera evidencia de que el café con cafeína ofrece cierta protección contra la enfermedad del Alzheimer, efecto que no se observa en otras bebidas que contienen cafeína o en el café descafeinado.
Algunos estudios observacionales previos habían sugerido que el consumo diario de café a partir de la mitad de la vida y en la tercera edad podría reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer. Trabajos previos de este grupo señalaban a la cafeína como el compuesto del café que ofrece esta protección, ya que disminuye la producción cerebral anómala de la proteína beta-amiloide, que se cree que causa la enfermedad.
Ahora esta nueva investigación indica que el café con cafeína induce un aumento en los niveles de sangre de un factor de crecimiento llamado G-CSF (factor estimulante de colonias de granulocitos). G-CSF es una sustancia que se encuentra muy disminuida en los pacientes con enfermedad de Alzheimer y ha demostrado mejorar la memoria en ratones con el modelo Alzheimer. De hecho, se ha llevado a cabo un ensayo clínico, en humanos, en el Instituto de Salud Byrd Alzheimer que ha estudiado el tratamiento con GCSF para evitar la progresión a Alzheimer en pacientes con deterioro cognitivo leve, una condición que precede a la enfermedad. Los resultados de ese estudio están siendo evaluados y se publicarán en breve.
Ingrediente desconocido
"El café con cafeína genera un aumento natural en los niveles de G-CSF en sangre", explica el neurocientífico Chuanhai USF Cao,autor principal del estudio. "La forma exacta en que esto ocurre no se conoce. Sabemos que hay una interacción sinérgica entre la cafeína y otros componentes desconocidos del café que producen dicho aumento en los niveles de GCSF sangre ". A los investigadores les gustaría identificar este componente aún desconocido para enriquecer así el café y otras bebidas con el fin de proporcionar protección a largo plazo contra el Alzheimer.
En su estudio, los investigadores compararon los efectos del café con y sin cafeína a los de la cafeína por sí sola. En un modelo de Alzheimer en ratones y en ratones sanos se apreció que el tratamiento con café con cafeína aumentaba de los niveles de G-CSF, algo que no producía ni la cafeína sola ni el café descafeinado.
El aumento en los niveles de G-CSF es importante, porque a largo plazo el tratamiento con café (pero no café descafeinado) mejora la memoria en ratones con modelo de Alzheimer. Los niveles más altos G-CSF en sangre producidos por  la ingesta de café se asocian con una mejor memoria. Los investigadores identificaron tres mecanismos por los que G-CSF parece mejorar el rendimiento de memoria en los ratones. "Los tres mecanismos podrían complementar la capacidad de la cafeína para suprimirla producción de beta amiloide en el cerebro", afirma Cao. "En conjunto, estas acciones parecen proporcionar al café un increíble potencial para proteger contra el Alzheimer, pero sólo si se beben cantidades moderadas de café con cafeína".
Hay que tener en cuenta que el estudio se ha llevado a cabo en EE.UU. y por eso recomiendan una ingesta moderada diaria de café (4 a 5 tazas al día) para que exista un efecto protector contra la enfermedad de Alzheimer.
No hay que olvidar que hoy día no existen medicamentos desarrollados para tratar el proceso subyacente de la enfermedad de Alzheimer, afirma Gary Arendash, investigador. "Por eso, no vemos ninguna razón por la cual un producto inherentemente natural como es como el café no pueda ser más beneficioso y más seguro que los medicamentos, especialmente para proteger contra una enfermedad que tarda décadas en manifestarse después de que comience en el cerebro".
Prevención segura
Los investigadores creen que el consumo moderado de café al día, comenzando por lo menos en la mediana edad (30-50 años) es una medida óptima para la protección contra la enfermedad de Alzheimer. "No estamos diciendo que el consumo diario moderado de café protegerán contra la enfermedad de Alzheimer", dice Cao. "Sin embargo, sí creemos que el consumo moderado de café puede reducir considerablemente el riesgo de esta terrible enfermedad o retrasar su aparición".
El café también contiene muchos ingredientes aparte de la cafeína que podrían ofrecer beneficios cognitivos contra la enfermedad de Alzheimer. El café es rico en compuestos antiinflamatorios que también pueden ofrecer beneficios de protección contra la enfermedad de Alzheimer. "Debido a que la enfermedad de Alzheimer se inicia varias décadas antes de que se diagnostique, cualquier tratamiento de protección, obviamente, tendría que ser consumido durante décadas", señala Cao. "Creemos que el consumo diario moderad o de café con cafeína es la mejor opción actual para la protección a largo plazo contra la pérdida de la memoria de Alzheimer. El café es barato, fácilmente disponible, parece atacar directamente el proceso de la enfermedad, y tiene  pocos efectos secundarios para la mayoría de nosotros".
"Además de café, dos opciones de estilo de vida -la actividad física y cognitiva- parecen reducir el riesgo de demencia. La combinación de ejercicio físico regular y mental con el consumo moderado de café parece ser un excelente enfoque multidisciplinar para reducir el riesgo o retrasar la enfermedad de Alzheimer", concluye Arendash. 

Perdonarse a sí mismo preserva la juventud y la salud y protege de padecer cáncer y Alzheimer

MASSACHUSETTS, EU.- El nuevo estudio de los investigadores de la Universidad de Brandeis (E.U.) han descubierto una fórmula simple para la longevidad: aprender a perdonarse los errores, lo que disminuye el nivel de estrés y preserva de este modo la juventud y la salud durante muchos años, según informó el sitio web actualidad.rt.

Durante dos semanas de pruebas, los científicos determinaron el nivel de estrés de 41 personas, midiendo la concentración de un agente inflamatorio (interleucina-6) mientras que los voluntarios respondían preguntas para evaluar su nivel de autocompasión. 
Los resultados del experimento mostraron que las personas que no están acostumbradas a compadecerse a sí mismas tenían un alto nivel de estrés en comparación con las que se caracterizaron por tener autocompasión. 
Además, los investigadores indicaron que los perfeccionistas no saben cómo hacer frente a una situación estresante y no hacen sino aumentar la tensión cuando se reprochan los errores, lo que provoca a menudo enfermedades cardiovasculares, cáncer y el mal de Alzheimer. 
Anteriormente, los expertos médicos ya informaron de que la capacidad de una persona de manejar las situaciones estresantes determina el nivel de su salud y bienestar, alegando que saber hacer frente al estrés ayuda a relajarse y vivir más tiempo. 
Así, al cruzar los recientes resultados con los datos de otras investigaciones, los científicos de Brandeis afirmaron que la mejor filosofía de vida es el perdón a uno mismo.
Solo aquellas personas que superan sus errores pueden lidiar rápidamente con el problema y logran los resultados deseados, opinan los expertos.
Además, aconsejan aprender a relajarse, meditar, aumentar los niveles de actividad física y seguir una dieta y horario regulares.

viernes, 11 de abril de 2014

La Universidad de Valencia descubre ocho nuevas moléculas que combaten el alzheimer


.Investigadores de la Universidad de Valencia (UV) han descubierto ocho nuevas moléculas activas contra el alzheimer que retrasan algunos de los procesos determinantes en el desarrollo de la enfermedad y siguen un mecanismo de acción novedoso, diferente al de los fármacos actualmente en uso.
http://www.rtve.es/noticias/20140409/universidad-valencia-descubre-ocho-nuevas-moleculas-combaten-alzheimer/914621.shtml

Consejos para cuidadores de enfermos de Alzheimer

Consejos y soluciones ante problemas que van apareciendo a lo largo de las etapas de la enfermedad
 Al igual que no hay dos enfermos que progresan de la misma manera ante una enfermedad, tampoco hay dos enfermedades de Alzheimer iguales, pero todos los pacientes pasan de una u otra manera por las diferentes fases o etapas diferenciadas a lo largo de su vida. 

A continuación se exponen una serie de consejos para facilitar la vida tanto al enfermo como al cuidador:

A la hora de comer nos podemos encontrar con situaciones como:
- Confusión con el uso de los cubiertos. Puede utilizar el tenedor para tomar una sopa o no saber manejarse con los útiles de la mesa. En este caso pondremos en la mesa sólo aquello que vaya a utilizar, de ese modo le facilitamos las cosas.

- Se distrae durante la comida y no la inicia o la continúa. Iremos diciéndole los pasos que ha de dar y le animaremos en cada uno de ellos.

- No mantiene los modales en la mesa: se mancha, juega con la comida, etc…
Ante todo tolerancia con él/ella. Muchas veces este comportamiento nace de una dificultad física para agarrar bien los cubiertos, eso se resuelve con útiles adaptados. Puede ser que el hecho de cortar se le convierta en un problema, entonces sacaremos a la mesa la comida ya cortada. En otras ocasiones es algún problema en la boca – dentadura que roza o una pequeña herida- lo que hace que el paciente no quiera comer. Debemos asegurarnos de que no sea este el caso.

- Come demasiado rápido con riesgo de atragantamiento. Podemos utilizar cubiertos de niño, más pequeños. Sacaremos a la mesa los platos sucesivamente, para evitar que vea muchas cosas juntas que puedan gustarle, lo que le puede hacer tragar más deprisa de lo normal.

- No quiere comer. Primero trataremos de darle una presentación apetitosa a la comida y mantendremos los sabores a los que está acostumbrado tanto tiempo como sea posible. También podemos hacerle participar en la elección del menú o darle a elegir entre dos cosas distintas, esto le ayudará a mantener la toma de decisiones.

A la hora de vestirse.
- Una de las primeras dificultades que surgirá es la que se refiere a elegir su ropa. Puede vestirse de verano en pleno invierno o viceversa. Lo mejor es dejar en su armario únicamente la ropa de temporada.

- Entonces es posible que reaccione enfadado/a ante lo que siente como una invasión de su espacio. Lo mejor es hacerle partícipe de que vamos a ordenar el armario y contar con su ayuda para ello.

- Llegará un momento en que no sepa vestirse en el orden correcto, puede ponerse la ropa interior por fuera, no saber como se colocan las prendas o ser incapaz de vestirse solo. El primer paso para ayudarle será colocar la ropa ordenada según debe vestirla. El segundo, simplificar las prendas todo lo posible: cinturas elásticas, no botones, cierres a los que acceda fácilmente, zapatos sin cordones, etc…
Si, finalmente, requiere de ayuda para vestirse, la persona que le atienda debe ir contándole lo que va haciendo, de ese modo evitamos que se sienta tratado “como un niño”. 

- Tal vez se nos presente la circunstancia de que el enfermo quiere desvestirse continuamente. El primer paso es comprobar que en su ropa no haya nada que pueda estar molestándole. Descartada esa posibilidad y si la manía continúa nos ocuparemos de que su ropa tenga los botones, cremalleras o velcros fuera de su alcance, y de que las prendas no sean fáciles de quitar sin ayuda.

- Finalmente, y cuando ya hay problemas de movilidad y equilibrio: le ayudaremos a vestirse sentado, de manera que evitemos posibles caídas.

A la hora de la higiene diaria. Este es un terreno delicado, dado que afecta a uno de los aspectos más íntimo de la vida de las personas.
- Con frecuencia el paciente de Alzheimer no quiere ducharse o lavarse los dientes. Habrá que ser firmes pero afectuosos, acompañarle o ayudarle a darse una ducha tratando de que sea una experiencia lo más grata posible: un jabón que le guste, aromas atractivos, la temperatura adecuada tanto del baño como del agua.
Es posible que necesitemos realizar algunos cambios: la bañera por un plato de ducha, o instalar un asiento. Se trata de facilitarle a él/ella y a nosotros mismos la tarea, y de hacerlo con seguridad.

- Cuando la enfermedad avanza se puede presentar el caso de que el paciente no reconozca el baño o el inodoro. Esto puede producir situaciones complicadas y poco agradables. 
Lo mejor es acompañarle al baño, explicándole que es lo que va a hacer allí y supervisando discretamente que se desviste y utiliza el baño correctamente. Pero siempre hay que recordar sus sentimientos acerca de que otra persona invada su intimidad…necesitaremos mano izquierda, paciencia, mucho cariño y algo de humor no vendrá mal.

- Cuando  empieza a darse una pérdida de control de esfínteres: preguntarle con cierta frecuencia si necesita ir al baño será una solución, en una primera fase. También puede ayudarnos el pautar un horario, si no lo teníamos. Y finalmente llegará la fase de los pañales, en la que, una vez más, nuestra sensibilidad será el factor que añadirá calidad a la vida de quien cuidamos.